Testimonio de Àlex Roca, deportista y conferenciante

«Cuando tenía 18 años, mi sueño, el de cualquier persona, era tener el carné de coche. Iba a todas las autoescuelas y me decían que yo no era apto porque no había un coche adaptado a mis condiciones. Pero por suerte encontramos una autoescuela que me permitió, con un coche automático y una bola en el volante, poder hacer como cualquier otra persona, exactamente lo mismo, pero de una forma distinta. Actualmente, para mí un gran facilitador en el coche es la bola en el volante. Es clave para mí porque me permite realizar movimientos en concreto y a la hora de aparcar genera que pueda moverme de forma muy adecuada y me siento completamente igual al resto.

Una persona seguramente no podrá hacer muchas cosas, aunque no tenga una diversidad funcional. Por esta razón, necesitará siempre de un entorno, ¿no? El entorno es un facilitador, el trabajo en equipo es otro facilitador. Por lo tanto, con esto quiero decir que todas y cada una de las personas se rodean de facilitadores.

Tenemos que intentar romper prejuicios, romper barreras y cada día avanzar un poquito más, porque dicen que de un grano de arena se puede hacer una gran montaña, ¿no?»